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EL CAMBIO

En Septiembre del 2019 nació Tritium Autrigonum con la intención de cambiar las cosas (a mejor) en Monasterio de Rodilla.

Hoy 3 años y 5 meses después ¿Qué tenemos?.

Algunos cambios, menos de los que desearíamos, pero más de lo que algunos esperaban.

Ya sé, que en ocasiones tenemos unos propósitos y las circunstancias hacen que no se puedan llevar a cabo. En este caso han concurridos factores externos a nosotros (una pandemia que nos ha tenido sin posibilidad de contacto) y luego una guerra que aunque haya sido lejos de nuestro país, ha hecho que en este mundo cada vez mas globalizado, se sintieran los efectos de dicho conflicto.

También han influido otro tipo de factores, como es el tener un ayuntamiento que no solamente no ha apoyado las sugerencias de Tritium Autrigonum sino que las ha entorpecido y dificultado, sin escuchar ni cooperar a una mejora de las relaciones sociales entre vecinos.

Ante esta situación y estos hechos ¿qué vamos a hacer?. Creo que la situación por parte de Tritium Autrigonum es clara y continúa presente en los propósitos de la fundación de la Asociación recogidos en los Estatutos de la misma.

Mi posicionamiento personal como Presidente de la misma es seguir en la línea de los principios que inspiraron la creación de la Asociación en beneficio de los vecinos  y teniendo presente que cada uno de los logros conseguidos como: el reconocimiento de Tritium Autrigonum  por parte de las Instituciones (Procurador del Común, Defensor del pueblo, Subdelegación de Gobierno, etc), la cloración de los depósitos de agua del pueblo, la adecuación de la entrada al barrio de Santa Marina,  la actuación de la Diputación en la carretera de Temiño, la publicación de la oferta laboral en el Ayuntamiento  (por citar solo algunos), no hubiera sido posible sin el ánimo y la fuerza de los socios y simpatizantes de Tritium Autrigonum.

Además gracias a la salida de Jorge Rey en los medios de comunicación con sus conocimientos de meteorología  se ha conseguido que muchas personas conozcan nuestro pueblo y se  haya puesto a Monasterio de Rodilla en el mapa.

Por ello mi agradecimiento personal, y la convicción de que perseverando en nuestras ideas y siendo inflexible con las injusticias, un cambio (a mejor),  es deseable y posible.

 

José Luis Arraya