La rumorología “que es la difusión tendenciosa de rumores o información no comprobada” parece ser un arte practicado en los tiempos en que la ociosidad era moneda corriente y no había internet para entretenerse.
Actualmente existen los bulos (falsedad articulada de manera deliberada para que sea percibida como verdad, con un fin específico) y éstos circulan más rápidamente por la multiplicación del efecto de los WhatsApp, Instagram, twitter, redes sociales, y su inmediatez y nulo o mínimo costo.
Hay rumores que corren de boca en boca, sin haber sido verificadas y sin acudir a las fuentes.
¿No sería mejor que en aras a la verdad y a la convivencia antes de divulgar una noticia de la que no se ha sido testigo se optase por callarse o verificar previamente si aquello que se comenta es cierto o no? Quizás de esta manera se evitarían muchos problemas, se favorecería la convivencia y se evitarían fricciones y malos entendidos.
“Los bulos y las mentiras destruyen la democracia. “
“Que buscan o con que intención?
Se realizan con la intención deliberada de engañar y manipular las decisiones y conductas de una comunidad para obtener un beneficio propio. También sirven para desprestigiar o enaltecer a una institución, entidad o persona.”
Nos engañan en gran medida porque “queremos ser engañados”:
“Buscamos la información que coincide con nuestros marcos mentales. Queremos creer aquello que nos conviene. Así es muy fácil que alguien que desee engañarnos lo consiga.
Tener confianza o amistad en una persona no la convierte en fuente informativa fiable. No es que pretendan mentirte o engañarte, (en algunos casos) es cuestión de desconocimiento.
Busca siempre de donde ha salido esa información y si ha sido confirmada por una fuente fiable.
Los engaños suelen suscitar pasiones o emociones (no lo racional), generalmente, negativas: enfado, indignación, alarma….
Frente a esto, reflexiona y confirma antes de hacerlo circular. Si no, podrías generar algo no deseado como perjudicar a alguien o a un colectivo, que seguramente es lo que desea el generador del bulo o mentira.”
Fuente: RAMON SALAVERRIA. Catedrático de periodismo en la Universidad de Navarra.
Un tema, éste, que daría para escribir un libro entero, pero que nos puede, si queremos, hacer reflexionar y actuar.
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José Luis Arraya