En le siguiente enlace puedes consultar más sobre esta iniciativa:
http://www.territoriosytesoros.es/burgos-enraiza
TRITIUM AUTRIGONUM apoya los objetivos y principios éticos de «BURGOS ENRAÍZA» y fomenta la divulgación de los mismos en su ámbito de actuación. Para ello, todos los que estéis interesados en apoyar esta iniciativa podéis poneros en contacto con la Asociación a través de la dirección de correo electrónico.
Las inquietudes y propuestas que reciba la Asociación se resumirán en un documento que se remitirá a nuestro Ayuntamiento, al que se le propondrá que este asunto pueda ser debatido, al menos, en sesión plenaria.
Las propuestas que hasta ahora ha realizado la Asociación relativas a la planificación de los servicios municipales y ordenación territorial, aún sin respuesta, se integrarán junto con esta iniciativa para fomentar los aspectos sinérgicos entre las mismas.
«La soledad se admira y desea cuando no se sufre, pero la necesidad humana de compartir cosas es evidente».
CARMEN MARTÍN GAITE.
«Herido por las lanzas mortales de las nostalgias propias y ajenas, admiró la impavidez de la telaraña en los rosales muertos, la perseverancia de la cizaña, la paciencia del aire en el radiante amanecer de febrero. Y entonces vio al niño. Era un pellejo hinchado y reseco que todas las hormigas del mundo iban arrastrando trabajosamente hacia sus madrigueras por el sendero de piedras del jardín. Aureliano no pudo moverse. No porque lo hubiera paralizado el estupor, sino porque en aquel instante prodigioso se le revelaron las claves definitivas de Melquíades, y vio el epígrafe de los pergaminos perfectamente ordenado en el tiempo y el espacio de los hombres…
…Macondo era ya un pavoroso remolino de polvo y escombros centrifugado por la cólera del huracán bíblico, cuando Aureliano saltó once páginas para no perder el tiempo en hechos demasiado conocidos, y empezó a descifrar el instante que estaba viviendo, descifrándolo a medida que lo vivía, profetizándose a sí mismo en el acto de descifrar la última página de los pergaminos, como si se estuviera viendo en un espejo hablado. Entonces dio otro salto para anticiparse a las predicciones y averiguar la fecha y las circunstancias de su muerte. Sin embargo, antes de llegar al verso final ya había comprendido que no saldría jamás de ese cuarto, pues estaba previsto que la ciudad de los espejos (o los espejismos) sería arrasada por el viento y desterrada de la memoria de los hombres en el instante en que Aureliano Babilonia acabara de descifrar los pergaminos, y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para siempre porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra.»
GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ.